¿Qué hacer si se ha acabado el líquido para lentes de contacto?

Puede pasarle a cualquiera no saber qué hacer si se ha acabado el líquido para lentes de contacto. Sabemos bien lo esencial que es tenerlo siempre a disposición, siendo crucial para limpiar, desinfectar e hidratar las lentes, garantizando tu seguridad y la comodidad de los ojos. 

Pero no hay que preocuparse en exceso, porque en caso de emergencia existen alternativas que pueden sustituirlo temporalmente.

Considerémoslas juntos.

1. No utilizar el agua del grifo

Si tu líquido para lentes de contacto se ha terminado, no utilices el agua del grifo en su lugar. Aunque pueda parecer una solución rápida, usar el agua del grifo para tus valiosas lentes es un movimiento arriesgado.

El líquido para lentes de contacto es una fórmula diseñada especialmente para garantizar su limpieza, desinfección e hidratación. Contiene ingredientes específicos que desempeñan roles cruciales en el mantenimiento de tus lentes y en la protección de la salud ocular. Estos componentes incluyen:

• agentes desinfectantes para eliminar bacterias y gérmenes;
• sustancias hidratantes para preservar la humedad de las lentes;
• detergentes suaves para eliminar residuos.
  
  
  
  
  

El agua del grifo, por mucho que parezca incolora e inodora, no es igual de eficaz ni segura.

De hecho, puede resultar dañina para el ojo y para las lentes, siendo posible causa de:

• riesgos de contaminación;
• ausencia de desinfección;
• posibles irritaciones;
• alteración de la forma de las lentes.

Puede contener impurezas, bacterias y minerales que no son adecuados para las lentes de contacto. Además, el agua del grifo no proporciona la desinfección necesaria, poniendo los ojos en riesgo de infecciones.

El uso de agua del grifo también puede causar irritaciones, enrojecimiento y sensación de cuerpo extraño en el ojo. Además, el agua puede alterar la forma de las lentes blandas e influir en la calidad de la visión.

Por lo tanto, si se te ha acabado el líquido para lentes de contacto, opta por alternativas más seguras como las que exploraremos a continuación.

2. Conservar las lentes de contacto en agua destilada

Dada la importancia de mantener tus lentes de contacto en condiciones óptimas incluso cuando se ha acabado el líquido específico, podemos hacer la vista gorda con una alternativa de emergencia representada por el agua destilada. 

De hecho, puedes conservar las lentes en ella como harías normalmente con tu líquido habitual. Repetimos, se trata de una solución para aplicar solo por un período muy breve, por ejemplo una noche, para luego comprar el líquido adecuado.

El agua destilada ofrece una opción más segura que el agua del grifo, ya que está libre del virus Acanthamoeba, particularmente riesgoso para la salud ocular.

Aunque el agua destilada no proporciona la misma gama de beneficios que el líquido específico para lentes, puede contribuir a mantener tus lentes húmedas y limpias. Pero es esencial reiterar que, debido al riesgo mínimo pero presente de infecciones, deberías tratar de sustituirla lo antes posible por el líquido adecuado.

3. Utilizar una solución salina o fisiológica

Si se ha acabado el líquido específico para lentes, en caso de necesidad puedes usar temporalmente una solución salina o fisiológica. Pero es fundamental tener presente que este tipo de líquido no es un desinfectante, por lo que no reemplazará completamente tu solución habitual.

Esta solución también puede ser adecuada como máximo para una noche, pero al día siguiente procura inmediatamente una nueva provisión de solución específica para lentes de contacto. 

La solución salina o fisiológica puede ofrecer algunos beneficios mínimos cuando se usa como solución temporal para las lentes. En situaciones de emergencia, puede ayudar a mantener las lentes hidratadas y limpias, reduciendo el riesgo de sequedad ocular e irritación. Sin embargo, es importante reiterar que la solución salina o fisiológica no proporciona la desinfección necesaria, ni está diseñada para conservar las lentes de contacto a largo plazo.

Después de haberte presentado la posibilidad de estas soluciones de emergencia, queremos ser completamente sinceros y darte el mejor consejo para preservar tus lentes y la salud ocular. 

Aunque la solución pueda llevarte tiempo, considera la posibilidad de buscar una farmacia abierta hasta tarde. La variedad podría ser limitada, pero al menos tendrás un producto afín a lo que usas habitualmente. Después, te sugerimos hacer la compra online inmediatamente o acudir al día siguiente a tu óptico de confianza para comprar la solución para lentes de contacto que usas habitualmente.

Si la situación se repite, podrías considerar el cambio a lentes desechables diarias. Aunque cambiar de lentes reutilizables a desechables pueda parecer una decisión importante, las lentes desechables diarias ofrecen higiene impecable, practicidad y comodidad. 

Te pones un par fresco cada mañana, sin necesidad de limpieza ni mantenimiento, y las tiras al final del día. Esta opción puede ser particularmente adecuada para uso ocasional o cuando tu solución específica para lentes de contacto no está disponible inmediatamente.